Redmond – Microsoft  informó que Steven Sinofsky, presidente de Windows y sus operaciones de Windows Live, deja la compañía de software.

La salida Sinofsky se produce tan sólo semanas después de que la compañía de software, con sede en Redmond Washington, lanzara Windows 8 al mercado. El nuevo OS representa uno de los cambios más importantes para la compañía en los últimos 17 años.

La veterana Julie Larson-Green fue promovida para dirigir la unidad de ingeniería de software y hardware de Window. Mientras que Tami Reller asumirá la responsabilidad del negocio de Windows sin perder sus puestos como director financiero y director de marketing.

Microsoft no dio detalles sobre los motivos o causas de la salida de Sinofsky.

En un comunicado, el CEO de Microsoft, Steve Ballmer, agradeció la contribución Sinofsky a la empresa. Indicó la necesidad de la empresa para integrar aún más su gama de ofertas, que además de Windows incluye servicios como Bing, Skype, Xbox y un equipo para su nueva tablet Surface, ya que comienza lo que él llamó “una nueva era de Microsoft.”

Ballmer dijo: “es imperativo que continuemos impulsando la alineación en todos los equipos de Microsoft, que requieren de ciclos de desarrollo más integrados y rápidos”.

El lanzamiento de Windows 8, el mes pasado, representa el mayor cambio del sistema operativo dominante de la industria en al menos 17 años. El nuevo OS busca crear un puente entre las computadoras personales y las tablets de interfaz táctil.

Sinofsky se unió a Microsoft como ingeniero de diseño de software en 1989. Antes de liderar la división de Windows, su trabajo también incluyó la supervisión del desarrollo de los productos de Microsoft Office.

Larson-Green ha trabajado con Microsoft desde 1993. Ella era responsable de la gestión de programas, diseño de interfaz de usuario y la investigación, así como el desarrollo de todas las emisiones internacionales de Windows 7 y Windows 8.

En su nuevo cargo, será responsable de todo el desarrollo futuro del producto de Windows, además de proyectar el futuro del hardware que la compañía cree.