“Los usuarios son los que tienen el control y son los dueños de la información”, corrió a informar Mark Zuckerberg en cuanto se percató de que se había pasado de la raya.

El CEO y fundador de Facebook publicó en el blog oficial sus más sinceras palabras de arrepentimiento, aclarando que todo se trata de un malentendido, que su filosofía es “que la gente controle su información y con quién la comparte” pero que al hacerlo “deben garantizarle a Facebook la licencia de usar esa información para ser consultada por la gente con quien han decidido compartirla en primer lugar”.

¿Ves que no querían quedarse con los derechos de tus cosas? Los entendiste mal, si son sólo un grupo de buenos chicos tratando de hacer su trabajo.

¿Pero cómo empezó este acontecimiento que movilizó a toda la blogósfera? Entérate en este pequeño resumen.

  1. El 4 de febrero Facebook no tuvo mejor idea que cambiar sus Términos y condiciones de uso aclarando básicamente que ellos se adueñaban de tu información, que tenían una licencia irrevocable y perpetua para editar, reproducir, transmitir, adaptar, coser, bordar, licuar y multiprocesar toooda la información que has subido y subirás al sitio (sujeto a tus opciones de privacidad), aunque borres tu usuario.
  2. Así sea que no supieron expresar lo que realmente quisieron decir, o que hayan sido controlados telepáticamente por Kang y Kodos, el revuelo en la web fue inminente, llenándose la esfera blogger internacional, la comunidad de Twitter, infinidad de Bookmarks e incluso un gran número de grupos en Facebook, de quejas y teorías conspirativas acerca del control que intentaba ejercer Facebook sobre los datos que son nuestros y nada más que nuestros.
  3. El Centro de Privacidad Electrónica de la Información (EPIC) puso el grito en el cielo y amenazó con instaurar una demanda federal contra Facebook.com si no se retractaba en su decisión. De hecho, técnicamente, un término de uso que no ha sido aceptado por el usuario a través del correspondiente formulario, no puede ser aplicado. De hacerlo, sería lisa y llanamente, ilegal.
  4. “¿Y que pasará con los derechos de autor?” “¿Y con la información que subí antes de que cambien los términos?”Miles de mensajes con estas cuestiones llegaron a las casillas de consulta de la red social más imponente de la web, con más de 175 millones de usuarios registrados al momento (sin restar, eso sí, los que han huído despavoridos en estos días, borrando permanentemente su cuenta).
  5. Ante los reclamos, las repercusiones y el miedo de ir a la corte a dar explicaciones, los chicos de Facebook decidieron volver a los Términos del 23 de septiembre de 2008, donde todo era paz y armonía.Mientras tanto, van a trabajar en las nuevas Condiciones de Uso, donde van a intentar ser más claros, para lo que solicitaron la ayuda de los usuarios.

Fue tal el alboroto por los términos y condiciones de Facebook que en estos días se registraron una gran cantidad de bajas. Tanto es así que los responsables del sitio se vieron en la obligación de advertirles a los que quisieran eliminar su cuenta de Facebook acerca de la vuelta atrás en los Términos y condiciones, afirmando que nosotros mismos somos los propietarios de nuestra información:

Todo aclarado entonces, al final resultó que Facebook no va a dominar el mundo asi que ya todos podemos ir a dormir en paz sabiendo que nuestras identidades están a salvo.

Por ahora.